Soy el último samurái al pie de esta batalla
voy con una katana rota y con el corazón casi que estalla
lo que el alma calla lo disparo con un verso que no falla
se clava en tu pecho como flecha, es el ariete que derrumba tus murallas

Del bushido heredé el respeto, la justicia y la cortesía
de ahí este coraje heroico con el que escribo poesía
Soy muy propio juez, soy juzgado por mi honor
el calor de mi benevolencia forma la calidez de mi amor.

Soy leal al código honorable que en mi cora fue grabado
no me desvió de la senda del guerrero aunque he sido traicionado
Si honestidad fuese mi apellido, sincero es que yo me llamo
sigo emprendiendo un viaje sin caballo, sin castillo y sin amo.

Como verdadero guerrero no soy inmune al miedo
lucha contra él y ante mis temores no retrocedo
cuido las palabras con las que me expreso cada día
por qué una sola palabra basta para declarar tu fuerza o cobardía

No persigo la victoria ni huyo de la derrota
por qué en ambos resultados siempre gano
en uno reconocimiento en la otra un alma rota
el ganar me hace un héroe, pero el perder me hace humano

Siempre vivo despeinado total, alguien cortará mi cabeza
por eso perfecciono mi arte, mi destreza y fortaleza
no olvido mi naturaleza por eso no persigo la grandeza
porque dentro de esta corteza la pureza de mi corazón es mi mayor riqueza

Como valoro esta vida de ante mano ya acepte la muerte
por qué temerle es una causa perdida, vanidad prepotente
Como samurái no creo en casualidades del destino, mucho menos en la suerte
vivo cada día como si fuese el último que respiro y eso es lo que me hace más fuerte

Y si traiciono este honor maldito será mi alma
que me destierren de mi pueblo o me fusilen a la luz del alba
de rodillas recitaré el haiku que escribí, de lo que viví y sufrí
de lo que recorrí y descubrí antes de morir por la cicatriz eterna del hara-kiri.

By: Sentarou